Impacto en la industria frigorífica: fallecen tres animales y el INBA alerta sobre posibles acciones del sector gremial.
Denuncia del INBA por muertes de vacunos en frigoríficos
El Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA) ha denunciado la muerte de tres vacunos en frigoríficos, asegurando que estas pérdidas son consecuencia de medidas gremiales sorpresivas.El organismo advirtió sobre el impacto ético y económico que estas acciones pueden tener sobre la imagen de Uruguay como proveedor de carne de calidad.
Desde el 30 de diciembre, un total de 2.093 vacunos han quedado a la espera de faena en diversas plantas, lo que pone en riesgo el bienestar animal, según señala el INBA.
En su informe, el instituto destacó que los corrales de los frigoríficos no están diseñados para largas estadías.
A pesar de que se les proporciona agua, alimento y sombra, estos espacios están destinados únicamente para descanso temporal.
La prolongación de la permanencia de los animales genera un estrés severo, cuyas consecuencias pueden ser fatales, como lo evidencian las recientes muertes.
La industria cárnica uruguaya, reconocida por sus altos estándares éticos, enfrenta desafíos significativos debido a la interrupción de las faenas.
“Estas medidas no solo impactan el bienestar de los animales, sino que también comprometen la imagen del país como proveedor de carne de calidad a nivel mundial”, señaló el INBA en su comunicado.
Llamado al diálogo
El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y el INBA reiteraron su llamado al diálogo y al cese de acciones que pongan en riesgo a los animales.Además, instaron a implementar soluciones que prevengan futuros conflictos y garanticen tanto la actividad industrial como la protección de los animales involucrados.
Alertas sobre las condiciones de los animales
Recientemente, el INBA había alertado sobre las condiciones en las que quedaban los animales que aún no habían sido faenados y que ya habían sido trasladados a los frigoríficos.En su comunicado, recordó esas advertencias y apuntó a las “constantes medidas sorpresivas” del sindicato que han dificultado la programación de las actividades de faena.
Esto ha llevado a una acumulación de vacunos en las plantas frigoríficas, donde deben permanecer indefinidamente, y en condiciones inadecuadas, a pesar de las medidas correctivas implementadas por la industria.
Los corrales son espacios de espera y descanso destinados a permanencias cortas y no para estadías prolongadas.
El INBA enfatizó que “los animales no están acostumbrados y no deben, bajo ningún concepto, permanecer varios días en los corrales, aun cuando se les proporcione agua, comida y sombra”.
Las repercusiones negativas de las medidas sindicales pueden llevar a situaciones extremas, incluso a muertes agónicas en los animales.
Fuente: El Telegrafo