Personas con problemas de adicción de Salto acceden a un tratamiento integral en el centro regional Casa Abierta, situado en Artigas.
Centro Regional Casa Abierta: Un Refugio para la Recuperación
Por Andrés Torterola El Centro Regional Casa Abierta es un dispositivo especializado en la atención de personas con consumo problemático de sustancias.Desde sus inicios, el servicio se enfocó en usuarios provenientes de los dispositivos Ciudadela de las ciudades de Artigas, Paysandú y Rivera.
Sin embargo, debido al aumento sostenido de la demanda, el centro ha ampliado su alcance y actualmente su equipo de profesionales está disponible para atender solicitudes desde cualquier rincón del país.
Construcción de la Demanda
CAMBIO tuvo la oportunidad de dialogar con Mónica Ledesma, directora del Centro, quien explicó que en la construcción de la demanda se considera fundamental la voluntad de la persona que ingresa al tratamiento.El comité de recepción, compuesto por psiquiatras, psicólogos, trabajadores sociales, licenciados en enfermería y operadores terapéuticos, se mantiene en estrecha comunicación con el comité nacional, lo que permite una atención coordinada y efectiva.
Internaciones y Atención
El tratamiento en el residencial Casa Abierta se realiza principalmente mediante la modalidad de internación.Actualmente, el centro cuenta con 17 camas: tres destinadas a mujeres, dos a adolescentes y el resto a adultos.
Mónica Ledesma indicó que el tratamiento ambulatorio se lleva a cabo a través del dispositivo Ciudadela, que se encarga de la atención, seguimiento y derivación de los casos.
Actualmente, hay pacientes internados provenientes de varios departamentos, incluyendo Paysandú, Tacuarembó, Durazno, Artigas, Bella Unión, Fray Bentos y Flores.
Aunque en este momento no hay internados oriundos de Salto, la directora subrayó que existe un contacto constante con el comité de recepción local para recibir información y posibles derivaciones.
Esta coordinación interdepartamental facilita respuestas adecuadas y oportunas a quienes requieren tratamiento, asegurando que el acceso no dependa exclusivamente del lugar de residencia.
Resultados y Reinsertión
Respecto a las recaídas tras el tratamiento, Ledesma comentó que la duración del proceso terapéutico es de tres meses, aunque se prioriza el ritmo y las necesidades individuales de cada usuario, lo que puede extender el tratamiento en algunos casos.Asimismo, se trabaja de manera integral en el egreso y la reinserción laboral.
En este sentido, el equipo de trabajadoras sociales ha establecido coordinaciones con distintas instituciones y empresas, con el propósito de facilitar la inclusión socio-laboral de los usuarios una vez finalizado el tratamiento.
En relación a la reincidencia en el consumo, Ledesma destacó que han recibido numerosos mensajes de personas que fueron internadas en el centro y que continúan con su proceso de recuperación sin recaídas.
"Estos testimonios son una muestra alentadora del impacto positivo del tratamiento y del acompañamiento brindado por el equipo", concluyó.
Reducción del Daño
Casa Abierta se enfoca en reducir el daño ocasionado por el consumo y prioriza la atención a los jóvenes de la zona norte del país.La modalidad de trabajo aplicada incluye internación, centro diurno y ambulatorio.
La nueva dirección técnica del centro presentará en breve su nuevo plan sanitario de trabajo, mientras que el comité directivo interinstitucional del proyecto elabora una estrategia social de acompañamiento para los jóvenes usuarios y sus familias.
Para llevar a cabo esta labor, los técnicos de Casa Abierta promueven la reflexión grupal para fomentar un cambio de conducta y el desarrollo de proyectos productivos en un centro rural de rehabilitación, donde se implementan actividades como equinoterapia, ordeñe y cultivo de huertas orgánicas.
Fuente: Diario Cambio