INIA y Fucrea se reúnen para analizar una zafra que plantea nuevos retos para el sector.
Jornada de Cultivos y Sistemas 2024: Desafíos y Oportunidades en el Agro Uruguayo
Organizada por el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) y la Federación Uruguaya de Grupos CREA (Fucrea)Un Panorama Retador para la Zafra
Durante la jornada, el ingeniero agrónomo Nazar Rodríguez, coordinador agrícola ganadero de Fucrea, indicó que “estamos frente a otra zafra desafiante” caracterizada por “más oferta y demanda selectiva”.Según Rodríguez, la planificación y el conocimiento de diferentes escenarios son vitales para la toma de decisiones.
Es fundamental definir valores objetivos para los negocios y diversificar las estrategias, evitando asumir riesgos innecesarios.
En este contexto, el cultivo de maíz se vuelve crucial, especialmente tras el desafío presentado por la chicharrita en la zafra anterior.
Rodríguez subrayó la importancia de contar con información actualizada, así como de buscar coberturas y seguros para minimizar las pérdidas.
Además, destacó el trabajo conjunto entre Fucrea e INIA, enfatizando la sinergia creada a lo largo de los años, que resulta esencial para aprovechar al máximo las investigaciones y experiencias de los productores en estas jornadas.
Enfoque en la Soja: Claves para el Rendimiento
El ingeniero agrónomo Gonzalo Invernizzi, integrante de la Comisión de Asesores Agrícola Ganadera de Fucrea, recordó que aunque se presta mucha atención al maíz, la soja representa más del 80% del área agrícola nacional.En un análisis de la zafra, resaltó que se han obtenido rendimientos superiores al promedio tanto para soja de primera como de segunda.
Variables como la fecha de siembra son determinantes, ya que las siembras tardías suelen traducirse en rendimientos más bajos.
Invernizzi también mencionó la influencia del ambiente de producción y las condiciones climáticas, indicando que en años con buenas lluvias se obtienen rendimientos significativamente mejores.
Además, el material genético es otro factor clave en el rendimiento del cultivo.
Al analizar una serie histórica de rendimientos de casi 20 años, el agrónomo observó que la variabilidad de rendimiento se ha incrementado, atribuible mayormente a cambios climáticos.
Esta variabilidad exige la creación de nuevos modelos que expliquen de manera más precisa el rendimiento de los cultivos en función de las condiciones climáticas.
La jornada reafirma la importancia de la investigación y la colaboración entre instituciones para enfrentar los retos del campo uruguayo y aprovechar las oportunidades que se presentan.
Fuente: El Telegrafo