Mujeres en situación de vulnerabilidad laboral apelan a la solidaridad de la comunidad.
La Realidad de las Trabajadoras Sexuales en Salto
Por Andrés Torterola En la sociedad actual, existe un sector que ha sido históricamente marginado y cuyos derechos no han sido respetados en numerosas ocasiones: nos referimos a las trabajadoras sexuales.A lo largo de los años, este colectivo ha enfrentado una exclusión sistemática, llevando a muchas a recurrir a soluciones que evocan épocas pasadas, como el trueque, para sobrevivir.
La falta de reconocimiento formal de su trabajo y la criminalización de su actividad son factores determinantes en su situación de vulnerabilidad extrema.
Su realidad está marcada, en muchos casos, por la discriminación, la violencia, la escasa atención a sus necesidades de salud y seguridad y la carencia de derechos laborales.
Falta de Recursos
En una entrevista con CAMBIO, Carla Pereira, referente en Salto de la Organización de Trabajadoras Sexuales del Uruguay (OTRAS), reveló que en nuestro departamento existen aproximadamente 64 mujeres reconocidas como trabajadoras de este sector.La mayoría son madres con hijos en edad escolar o liceal, quienes están enfrentando dificultades económicas y requieren apoyo para la adquisición de útiles y materiales de estudio.
Esta situación resalta la vulnerabilidad de este colectivo, que no solo enfrenta la exclusión social y laboral, sino que también debe atender las necesidades básicas de sus hijos, quienes son, en muchos casos, los más afectados por la falta de recursos.
Además, OTRAS ofrece apoyo a ex trabajadoras sexuales que, debido a su edad, ya no pueden continuar en un ámbito donde la presencia de mujeres jóvenes es cada vez más común.
La presión que ejercen las trabajadoras más jóvenes limita considerablemente las opciones de las mujeres mayores para seguir trabajando.
Por otro lado, hay mujeres de alrededor de 50 años que, ante la falta de alternativas laborales, se ven obligadas a continuar en esta actividad.
Exclusión Social
En muchos casos, estas mujeres enfrentan situaciones tan precarias que se ven forzadas a aceptar comestibles a cambio de sus servicios.Esta situación refleja la falta de oportunidades laborales y sociales para ellas.
A pesar de su largo recorrido laboral, se encuentran atrapadas en un círculo de pobreza y exclusión, sin acceso a una red de protección adecuada ni a alternativas dignas, señaló Pereira.
La intervención de organizaciones como OTRAS resulta fundamental para acompañar y promover alternativas de inclusión laboral y social, buscando mejorar sus condiciones de vida y asegurarles un futuro estable.
Para aquellos que deseen colaborar, el número de contacto para donar útiles escolares y materiales de estudio es el 096-649-844.
Fuente: Diario Cambio