El cardenal Daniel Sturla, arzobispo de Montevideo, compartió este miércoles con Subrayado detalles sobre su experiencia en el cónclave que llevó a la elección de Robert Prevost como nuevo papa de la Iglesia Católica.
Participación del Cardenal Daniel Sturla en el Cónclave Papal
El arzobispo de Montevideo, Daniel Sturla, formó parte del reciente cónclave que eligió al cardenal peruano-estadounidense como nuevo Sumo Pontífice.En declaraciones realizadas tras este trascendental evento, Sturla mencionó la posibilidad de que el papa León XIV visite Uruguay: "Si Dios le da salud y fortaleza, que todo indica que sí, va a venir a Uruguay".
Sturla subrayó que el nuevo papa tiene presente la agenda del papa Francisco con respecto a Argentina y Uruguay, la cual quedó pendiente.
Durante el cónclave, el cardenal tuvo la oportunidad de presentar la Iglesia Uruguaya al papa León XIV.
"Siempre digo que la Iglesia Uruguaya es pobre y libre, pequeña y hermosa, y por ende, hay que conocerla y quererla mucho", afirmó emocionado.
Respecto a su experiencia en el cónclave, expresó: "Fue una experiencia maravillosa, sin duda un momento de fe, pero también una significativa experiencia humana, cargada de responsabilidad por estar presente en un acontecimiento histórico".
Destacó la rapidez con que se llegó a una elección, lo cual reflejó un amplio consenso entre los cardenales, informando que esto "llena de alegría".
Sturla compartió lo que vivieron en Roma, donde se sintió una "explosión de alegría" en el momento en que se observó la fumata blanca.
Al ser consultado sobre el ambiente dentro del cónclave, comentó que había una gran serenidad, aunque también una palpable tensión dada la importancia de la responsabilidad que cada cardenal comprendía que tenía.
"Todo se vivió con serenidad, acompañado de un sentido de oración.
La votación en la capilla Sixtina se desarrolla en silencio; uno puede hablar con el que está al lado, pero no hay espacio para discusiones ni grandes conversaciones", explicó.
En los momentos de almuerzo y cena, los cardenales intercambiaron opiniones no solo sobre la elección del pontífice, sino también sobre otros temas, manteniendo un clima de tranquilidad y concordia.
Finalmente, Sturla añadió que durante los 15 días previos a la elección, se llevaron a cabo reuniones donde cada cardenal tuvo la oportunidad de expresar sus puntos de vista.
Fuente: Subrayado