El Domingo de Ramos trae una sorpresa conmovedora: el papa Francisco regresa sin cánulas nasales, emocionando a todos al compartir su saludo con los fieles.
Misa del Domingo de Ramos en la Plaza de San Pedro
La Plaza de San Pedro, en el Vaticano, se convirtió en el escenario de una emotiva y simbólica celebración con la Misa del Domingo de Ramos, que da inicio a la Semana Santa.Este año, la jornada fue aún más significativa gracias a la inesperada presencia del papa Francisco.
A pesar de su reciente convalecencia tras varias semanas de enfermedad, el pontífice se unió a los fieles para compartir un mensaje de compasión y esperanza.
El papa Francisco hizo su aparición sentado en una silla de ruedas, mostrando un aspecto saludable y sin cánulas nasales.
Durante su breve recorrido por la plaza, tuvo la oportunidad de estrechar las manos de los asistentes y repartir dulces a los niños presentes.
Desde el altar, ubicado frente a la majestuosa Basílica de San Pedro, el líder de la Iglesia Católica deseó un "feliz Domingo de Ramos, feliz Semana Santa" a todos los congregados.
Cabe recordar que el papa estuvo ingresado durante más de cinco semanas en el hospital Gemelli de Roma, donde recibió tratamiento por una neumonía en ambos pulmones.
Con información de AFP.
Fuente: Telenoche