Mientras se recupera en el hospital, Francisco no ha dejado de mantenerse al tanto de los acontecimientos, dedicando el tiempo que puede a su trabajo y a seguir de cerca las devastadoras inundaciones que han golpeado a Argentina.
Mejoría en la salud del Papa Francisco tras hospitalización por neumonía
El Papa Francisco, quien lleva más de tres semanas hospitalizado debido a una neumonía, ha mostrado signos de mejoría y sus avances se han "consolidado".Por lo tanto, los médicos han decidido que su pronóstico deja de ser reservado, aunque deberán permanecer "algunos días más" en el hospital.
En un boletín médico emitido el lunes por la noche, el Vaticano informó que "las mejoras registradas en los días anteriores se han consolidado aún más", respaldadas por análisis de sangre y una buena respuesta a la terapia farmacológica.
No obstante, el estado clínico del pontífice de 88 años sigue siendo "estable".
Sin embargo, dado el complejo cuadro clínico y la severidad de la infección al momento de su ingreso, se requerirá continuar con el tratamiento médico en un entorno hospitalario durante algunos días adicionales.
Poco antes de que se anunciara la mejora en el pronóstico, una fuente del Vaticano indicó que era "demasiado pronto para hablar de su regreso a Santa Marta", la residencia papal en la Santa Sede.
A pesar de que hay "signos positivos en la evolución de la enfermedad", también se enfatizó la necesidad de proceder con cautela, destacando que la neumonía no ha sido completamente superada, aunque actualmente no hay peligro inminente.
Una semana después de su hospitalización, el 14 de febrero, el profesor Sergio Alfieri había señalado ante la prensa que la situación del Papa era preocupante.
Desde su ingreso en el hospital Gemelli de Roma, el sumo pontífice ha atravesado varias crisis respiratorias, la última de las cuales ocurrió hace siete días.
El Vaticano informó en la mañana del lunes que Francisco había tenido "una noche tranquila" y se dedicaría al trabajo de terapia física y respiratoria durante el día.
En el transcurso de su estancia, se le ha cambiado la máscara de oxígeno por una cánula nasal de alto flujo, un método que resulta menos invasivo.
Pese a su condición, el Papa ha estado trabajando de manera intermitente y se ha mantenido al tanto de las noticias, incluyendo la reciente tragedia por inundaciones en su país natal, Argentina.
El lunes, expresó sus condolencias en un telegrama por las víctimas del desastre natural que afectó la región de Bahía Blanca, dejando al menos 16 muertos y un centenar de desaparecidos.
En sus palabras, Francisco ofreció "fervientes sufragios por el eterno descanso de los fallecidos" y manifestó su cercanía espiritual a toda la población afectada.
Agradecimiento al personal médico
El Papa ha enfrentado varios problemas de salud en los últimos años, incluida una operación de colon en 2021 y otra por una hernia en 2023. Sin embargo, esta es su hospitalización más prolongada y compleja desde que asumió el papado en 2013. En ocasiones anteriores, Francisco salió al balcón del hospital Gemelli para la oración dominical del Ángelus, pero en esta oportunidad, lleva cuatro semanas enviándolo por escrito.El pasado domingo, agradeció públicamente al personal médico: "Hermanos y hermanas, en mi prolongada hospitalización, he experimentado el esmero en el servicio y la ternura en el cuidado, especialmente por parte de los médicos y de los operadores sanitarios, a quienes agradezco de corazón".
Desde su ingreso, el Papa no ha sido visto en persona, habiendo emitido solo un mensaje de audio en el que agradeció las oraciones por su pronta recuperación.
Hasta el momento, los médicos no han especificado cuánto tiempo más continuará su hospitalización ni cuánto podría llevar su convalecencia.
Matteo Peafrini, un voluntario de Protección Civil de la región de Lombardía, compartió esperanzas sobre la recuperación del Papa: "La esperanza de que el Papa se recupere está siempre presente en nosotros".
FUENTE: AFP
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