¿Se encuentra en peligro la cohesión del gobierno actual?
Patrones Electorales en los Balotajes: Tres Reglas de Oro que Podrían Romperse en 2024
Por Pablo Perna Esta semana, el diario El País publicó una editorial titulada "Tres reglas de oro de balotajes proclives a romperse este 24".La misma presenta interesantes patrones de conducta que se han observado desde el primer balotaje en 1999 hasta la actualidad.
Se prevé que, independientemente del ganador del balotaje programado para el último domingo de noviembre, alguna de estas reglas quedará desafiada.
Primera Regla de Oro
Desde 1999, el candidato que resulta victorioso en la primera vuelta de octubre es también el ganador del balotaje en noviembre.En 1999, los partidos Blanco y Colorado, juntos, vencieron al Frente Amplio en octubre, lo que llevó a Jorge Batlle a la presidencia en noviembre.
A excepción de 2004, donde Tabaré Vázquez obtuvo la victoria en la primera vuelta, el patrón se ha mantenido.
En 2009 y 2014, el Frente Amplio superó a los partidos tradicionales en octubre, resultando en las victorias de José Mujica y Tabaré Vázquez respectivamente.
En 2019, la coalición opositora ganó en octubre, consagrando a Luis Lacalle Pou en noviembre.
Si esta regla se mantiene, Álvaro Delgado sería el próximo presidente.
Segunda Regla de Oro
Históricamente, el Frente Amplio ha incrementado su caudal electoral entre la primera y la segunda vuelta.En noviembre de 1999, el Frente Amplio cosechó 120.576 votos más que en octubre; en 2009, 92.376; en 2014, 107.381; y en 2019, 202.895 votos adicionales.
Este año, la diferencia de votos entre los partidos de la coalición y el Frente Amplio en octubre fue de 90.224. Si se sigue esta tendencia, el nuevo presidente sería Orsi, dado que el incremento histórico de la izquierda entre las dos votaciones supera ampliamente la diferencia actual.
Tercera Regla de Oro
Desde 1999 hasta 2019, los partidos de la Coalición han perdido votos entre la primera y la segunda vuelta.En 1999, la pérdida fue de 24.187 votos; en 2009, de 67.739; en 2014, de 82.559; y en 2019, de 125.945 votos.
De seguir esta pauta, si el Frente Amplio mantiene su votación de octubre y la Coalición pierde la diferencia de 90.224 votos, el nuevo presidente sería Orsi.
Sin embargo, si la izquierda retiene el mismo número de votos y la Coalición pierde menos que la diferencia, Álvaro Delgado asumiría la presidencia.
En resumen, las elecciones de noviembre presentan un panorama complejo.
Los patrones históricos pueden proporcionar indicios sobre resultados futuros, pero la dinámica electoral siempre puede sorprender.
Fuente: Diario Cambio
