Tres expertos del ámbito de la salud serán llamados a declarar en la controversia legal que enfrenta a un destacado cirujano plástico.
Demanda Civil Contra Clínica de Cirugía Plástica por Fallecimiento de Paciente
La jueza letrada en lo civil de 6º turno, Gaiela Aída Tuberosa Etchart, ha dispuesto la comparecencia como testigos de tres médicos en el marco de la demanda civil presentada por los familiares de Sandra Quinche contra el titular de la Clínica de Cirugía Plástica, Boris Segal.La audiencia está programada para el próximo 9 de setiembre en la sede del juzgado civil de 6º turno de Maldonado, en el contexto del juicio caratulado “Quinche Elisa y otros c/Segal, Boris, daños y perjuicios y otros derivados de responsabilidad médica”.
La demanda fue interpuesta por los cuatro hermanos de Sandra Quinche, quien falleció el 29 de octubre de 2017 tras someterse a una cirugía de dermolipectomía, liposucción y aumento de glúteos en la mencionada clínica.
Según una de las hermanas de la víctima, ella acompañó a Sandra a la clínica a primera hora de la mañana y, tras ocho horas sin recibir novedades, decidió comunicarse con el establecimiento.
El médico que atendía a su hermana le aseguró que Sandra estaba en perfectas condiciones, e incluso había comido una manzana y tomado un café con leche, indicando que solo faltaba realizar una serie de valoraciones para darle el alta esa misma jornada.
Desenlace Trágico
No obstante, poco después, el mismo médico se volvió a poner en contacto con la hermana para pedirle que se dirigiera al Sanatorio Cantegril, ya que Sandra había entrado en coma.Minutos más tarde, el médico salió de una reunión para comunicarle que la paciente había sufrido un infarto y que su estado era muy grave.
Lamentablemente, Sandra Quinche fue ingresada al CTI del Cantegril, donde sus familiares fueron notificados de su fallecimiento al día siguiente.
Horas después, dos de sus hermanos presentaron una denuncia policial.
El caso fue derivado al juzgado penal de 10º turno, pero la denuncia fue archivada posteriormente.
A pesar de ello, los familiares decidieron interponer una demanda civil en el juzgado letrado de 6º turno de Maldonado, reclamando un daño moral de 100 mil dólares para cada uno de los cuatro hermanos, además de otros 100 mil dólares por la afectación del proyecto de vida de la causante.
También solicitaron un lucro cesante de 11.
378.
174 pesos, junto con los reajustes legales correspondientes.
Los demandantes argumentan que la clínica no contaba con la autorización necesaria del Ministerio de Salud Pública para llevar a cabo cirugías que implicaran anestesias de larga duración.
Fuente: Correo Punta del Este