El cautivador relato del gol olímpico: su legado, la huella en la celeste y los secretos para lograr una ejecución magistral.
Historia del Gol Olímpico en el Fútbol
Hace un siglo, la FIFA implementó un cambio significativo en el reglamento del fútbol, permitiendo que los goles de tiro de esquina fueran válidos de forma directa, sin necesidad de la intervención de otro jugador, a excepción de quien ejecutara el córner.Esta modificación representaba una innovación en las reglas del juego que antes había estado prohibida.
Tras consagrarse campeones en los Juegos Olímpicos de Colombes 2024, la selección argentina retó a los nuevos campeones a un partido amistoso en Buenos Aires.
Este encuentro se llevó a cabo cuatro meses después de que Uruguay se impusiera a Suiza con un contundente 3 a 0 en la final olímpica.
Antes de alcanzar los 15 minutos de juego, Cesario Onzari, jugador albiceleste, ejecutó un tiro de esquina que se cerró hacia el arco, logrando vencer al portero celeste, Celeste.
Este momento representó el primer gol de tiro de esquina registrado en la historia, el cual fue denominado “gol olímpico” debido a su conversión ante el campeón de la mencionada competencia.
El Gol Olímpico en la Selección Uruguaya
En la rica historia del fútbol uruguayo, solo se ha documentado un gol olímpico.Este acontecimiento tuvo lugar en 1983 durante un amistoso contra Perú en Lima, que finalizó en empate 1 a 1. El autor del gol celeste fue Juan Francisco Muhlethaler, quien recordó aquel momento describiéndolo como “un poquito de buena pegada, que la pelota se cierre correctamente y bastante suerte”.
Álvaro “Chino” Recoba, reconocido como uno de los grandes especialistas en este tipo de anotaciones, también compartió su perspectiva sobre el gol olímpico.
Explicó que la ejecución depende de varios factores, tales como la técnica empleada, las condiciones meteorológicas y, por supuesto, un toque de azar.
Fuente: Telenoche